La madera es un material que se ha utilizado desde los principios de la historia para la fabricación de casas. A lo largo de los siglos ha demostrado ser un material excelente que ofrece numerosos beneficios, sin embargo, la llegada de nuevos materiales a partir del siglo XX fueron reduciendo su uso. Estos nuevos materiales todavía tienen que demostrar en siglos venideros su resultado en la construcción y hasta donde llega su durabilidad.
La madera es un material insuperable por sus propiedades a nivel ambiental, económico y para la salud. A continuación vemos por qué elegir una casa de madera:
A NIVEL AMBIENTAL
A nivel ambiental, el uso de madera adquirió muy mala fama por las malas prácticas en cuanto a deforestación de montes, por ejemplo en España para la construcción de la armada invencible. A día de hoy y con la aplicación de la selvicultura (conjunto de tratamientos aplicados a una masa forestal con el propósito de lograr su perpetuación en el tiempo) la madera se corta bajo prescripción y con autorización de la Administración y el uso de madera ayuda a reducir el riesgo de plagas e incendios en los montes. Para la fabricación de casas de madera por lo general se usan especies locales que permiten el rejuvenecimiento de los montes ya que al cortar árboles viejos se plantan otros más jóvenes y se realiza limpieza de matorral que en un incendio puede ser como catastrófico y actuar como acelerante. Debemos saber que hoy en día la principal causa de deforestación se debe al aceite de palma, se deforestan superficies para plantar palma, cuyo aceite se usa en comestibles, cosméticos, etc. Y es algo que mucha gente desconoce.
El uso de la madera a nivel ambiental es inigualable ya que es el único material natural, ecológico, sostenible, reciclable al 100%, reutilizable y que ayuda a mitigar el cambio climático. Los árboles al crecer en la función de la fotosíntesis almacenan carbono y ese carbono se queda almacenado en su madera para siempre, por lo tanto mientras otros materiales desde su fabricación están emitiendo Gases Efecto Invernadero, si sumamos los gases emitidos en la fabricación de productos de madera y los almacenados en el crecimiento del árbol puede dar como resultado emisiones de Gases Efecto Invernadero nulas o incluso negativas, es decir usando madera eliminamos estos gases de la atmósfera y al plantar nuevos árboles seguimos absorbiendo carbono y limpiando la atmósfera. Por ejemplo, hay estudios que demuestran que sólo una ventana de madera contando con todo su proceso de fabricación elimina 144 kg de CO2 de la atmósfera, así que imaginemos una casa de madera completa.
A NIVEL ECONÓMICO
A nivel económico una casa de madera resulta más rentable. La eficiencia energética que ofrece la madera la están intentando alcanzar otros materiales. La madera de por sí como material por su composición es uno de los mejores aislantes térmicos y acústicos. Un ejemplo simple son las cucharas de madera usadas en cocina, su mango no quema aunque esté insertada en agua hirviendo y su durabilidad aunque se enfrenta a cambios de temperatura y humedad hace que pueda durar siglos. Con las casas de madera se ofrece una eficiencia energética que hace que su consumo en calefacción y aire acondicionado se reduzca al mínimo, incluso ya hay casas de consumo energético cero, por lo tanto durante los años que tienes una casa de madera estás ahorrando dinero
A nivel económico también se ha de tener en cuenta la durabilidad, las casas de madera han demostrado durar siglos, un ejemplo es la casa de madera más antigua de Europa que ha cumplido 700 años y sigue habitable. Este nivel de durabilidad está por demostrar por otros materiales. Si a esto sumamos la rapidez en la construcción, ya que se reducen tiempos de fraguado y montaje, su construcción puede equipararse a otras en las que se usan otros materiales. Y en mantenimiento es incluso menor que otras que requieren limpiado de fachadas, pintar las paredes o arreglar humedades.
RESPECTO A LA SALUD
Respecto a la salud, hay estudios que demuestran que la madera beneficia nuestra salud, por su composición ayuda a mejorar el sueño, reduce el riesgo de reuma, mejora la calidad del aire por su composición porosa y actúa como apantallamiento de determinadas ondas. A nivel psicológico también aporta beneficios vivir en una casa de madera, su origen natural hace que la madera guste a todo el mundo estéticamente y aporta tranquilidad mental pudiendo reducir el riesgo de depresión. De hecho existe la maderoterapia, en la que se usa madera para equilibrar la energía, reafirmar y tonificar el cuerpo.